16.8.09

de sangre, fuego y hambre

1957

1963

1968

1973

1977

1978

1981

1987

1989

1993

1994

1998

2008



me puse a mirar las fotografías ganadoras, desde hace más de 50 años, del world press photo. elegidas la imagen del año, entre sucesos de todo el mundo, en más de medio siglo.
todas expresaban formas de violencia.
como que las últimas décadas no tuviesen más que contarnos, mostrarnos, que guerras, dolor, fracturas, inmolación, hambre, heridas, llantos. y es terriblemente cierto.
por una parte.
porque por un lado, pareciesen empeñarse en mostrarnos lo bien, lo mejor, que anda todo.
por otro, no parece haber mucha diferencia en lo que nos toca ver, con 50 años atrás.
la violencia se palpa. en el metro, en las calles, en los campos, en la universidad, entre nosotros.
mi comentario no tiene nada de nuevo. bien podría haberse hecho hace, claro, 50 años.
donde ocurría la misma violencia. y a la vez, existían también los espacios donde esa violencia se enfrentaba, y era transformada. pero claro, desde ese lugar, el periodista fotográfico no obtendría fotografía ganadora.
mi comentario es bien añejo. de hecho, no creo decir nada nuevo.
pero, extrañamente o ilusamente, no deja de resentirse. veía las fotos. y la violencia que las atravesaba a todas.
y a la vez que la ocultan, niegan y reniegan, premian su retrato.
y como una violencia desencadena más violencia.
como en un lugar, una bala por la espalda, lleva en otro lugar a estudiantes interrumpir sus conversaciones, levantarse de las mesas y huir de las piedras y del humo lacrimógeno. y nos queda la angustiante sensación. y el volver al espacio donde el periodista fotográfico no obtendría su foto premiada, pero ahora, todo impregnado de esa violencia ganadora.
está como todo lleno de paradojas. y poco entiendo todo. hoy comentaba que no comprendería cómo una represión podría ser tal, por parte de una persona a otra, de no mediar en esa persona sustancias, formaciones, odiosidades implantadas, lógicas ajenas, deformaciones. que le alteren, que le lleven a actuar de tal modo. o prefiero creer eso.
pero en verdad, aún así, no se entiende nada.
y sí, mi comentario es bien bien añejo de hecho. ni sé exactamente porqué lo escribo.
bien puede haber sido realizado hace 50 años, o 200 o 2000. o tres días.
no digo nada nuevo.
lamentablemente.

5 comentarios:

Pazzistika dijo...

pero que entretenido
volver y revolver un tema.
le quiero mujer avisame para
la devolucion de tus prestamos!

pk dijo...

me daba como pudor publicar esto. así como en la personal.
no hablando desde el ente ficticio que come vidrios, digamos.
pero quise publicar las fotos. y me nació escribir algo. y dije, 'qué va'.

vale la pena ver la historia detrás de cada foto, algunas más evidentes -o de público conocimiento- que otras.

pk dijo...

cm me dijo no se captaba bien lo que quería decir con lo escrito.
y es que sí, fue bien corriente de la conciencia. entonces, reflejo del mezcolanceo de pensamientos que en ella hay.
y porque podría haber seguido extendiendome, quizás aclarar un poco a que iba, pero en verdad no pretendía hacer ni un ensayo ni un comentario tan coherente.
más bien fue expresión, sin mucho procesamiento, de lo que me surgió con las fotos.
contradictorio en sí.

Conti dijo...

voy a aplicar lo primero que salga. fui yo la que te dijo que no entendí a lo que iba en concreto.
pero claro, no había nada que entender.
me nació dolor al ver las fotos, cierta incredulidad, rabia, impotencia.
muchas veces me pasa que me encuentro una niñita que no sabe nada, que no cacha nada. porque veo las fotos y me conmueve, pero yo escribo esto en una cama calentita. y entiendo eso de la violencia que me toca ver en la calle, o en las manifestaciones a las que frecuentemente voy, pero igual soy una privilegiada mal educada.
no se si por culpa o por convicción, al ver esta y otras tantas manifestaciones del odio y del amor (porque en algunas de estas fotos de un modo hay amor) me dan ganas de hacer la revolución. y ahí nuevamente la pregunta por la violencia.

ayer vi doctor zhivago, y en 3 horas de pelicula se pregunta por los excesos y la altaneria de creer tener la respuesta.

quiero creer que se puede hacer algo.
no me gusta pensar que el hombre es naturalmente bueno, o naturalmente malo. ambas cosas producen excesos e imponen estándares que no estoy muy segura de querer alcanzar.
y ahí uno se las tiene que batir con el escepticismo, y tener la guata fuerte y las ganas en alto.
dejar de llorar porque no puedo dormir, y hacer hasta que me de puntada.
¿pero como no excederse?

cómo superar el odio con amor?

que se yo de tantas cosas cliches. pero tenemos que buscar algo. no quiero ser el marxista cómodo que describia engels que cree que borrando esto se impone la revolución mañana.
no se puede así.
pero tampoco se puede aceptar la toma de fotos fugaces y rapaces.
las fotos se toman rápido, debe ser porque fotografían desde el tiempo en que andamos en auto, matamos con revolver y de pronto tenemos 40 y una familia constituida y buenos asados, y buenas casa.

no quiero sonar soberbia, tampoco conformista

difícil, muy difícil

hay que seguir discutiendo, aunque sea en medio de la incoherencia del fin de semestre

Conti dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.